La Universidad Nacional de Formosa (UNaF), junto a otras tres casas de altos estudios de la región, tiene en la última etapa de desarrollo un proyecto sobre “estudio de gestión y tratamiento de residuos domiciliarios y urbanos en ciudades intermedias”, en el marco de las iniciativas académicas con impacto social.


Este trabajo fue posible gracias a los convenios entre el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) y el Programa de Proyectos de Investigación Científica y Tecnológica Orientados (PICTOS). Participan las Universidades públicas de Formosa (UNaF), del Nordeste (UNNE), de Misiones (UNaM) y Tecnológica Regional de Resistencia (UTN).
El coordinador regional es el arquitecto Mario Beret (UNNE) y el período de ejecución del proyecto se extiende desde 2011 hasta el año en curso.
En la provincia
En este marco, la UNaF lleva adelante el subproyecto “Diagnóstico ambiental inicial de gestión de residuos de las ciudades de Formosa y Laguna Blanca” mediante convenios firmados con las autoridades municipalidades de esas ciudades.
Así lo explicó el investigador responsable del proyecto, el ingeniero MSc. Máximo Carlos Gorleri, de la casa de altos estudios local.
Cabe señalar que el objetivo general que persiguen las Universidades de la región con esta iniciativa consistió en: identificar y desarrollar lineamientos e instrumentos de gestión para el tratamiento y manejo de residuos domiciliarios y urbanos en las ciudades intermedias del NEA, para minimizar, aprovechar y reciclar residuos urbanos a efectos de evitar el deterioro ambiental.
Respecto a los objetivos específicos, Gorleri precisó que en la mayoría de las ciudades intermedias de la región no se disponían de datos ciertos sobre las características, composición o cantidades de los residuos que se gestionan diariamente.
Esto puede llevar a dos situaciones: que se tomen decisiones que implican incidencia en la ejecución presupuestaria de los Gobiernos locales sin datos ni estudios de referencia, aspecto que produce dos situaciones muy comunes: se evita la inversión, por un lado; y se realizan gastos e inversiones sustentados en una fuerte decisión política, pero acompañadas de desaciertos técnicos instrumentales, por el otro.
Propósitos alcanzados
Señaló Gorleri que las investigaciones académicas han logrado cumplir con los objetivos específicos propuestos, entre los que enumeró: elaborar un diagnóstico ambiental inicial y un mapa regional de la problemática de gestión y tratamiento de residuos domiciliarios y urbanos en la región NEA; confeccionar propuestas específicas dentro del marco de gestión integral, para distintas áreas de interés en la problemática del proyecto; identificar tecnologías de valorización social y ambientalmente apropiadas y evaluar la valoración energética de los residuos.
Además, difundir los avances y resultados del proyecto a la comunidad científica, el sector industrial, las instituciones públicas y el público en general, buscando familiarizarlo con las nuevas oportunidades que muestra la integración de las energías renovables con la reutilización de Residuos Sólidos Urbanos (RSU).
“Se ha contribuido a fortalecer el desarrollo y la aplicación de políticas de gestión de residuos sólidos con criterio sustentable por parte de los Municipios de las ciudades intermedias en la Región NEA, basadas en modelos de gestión ambiental de residuos sólidos urbanos, para encarar de manera eficiente y eficaz mecanismos de procesamiento y aprovechamiento de dichos residuos, con resultados beneficiosos para la sociedad”, sostuvo Gorleri.
Generación de conocimientos
Acotó el investigador formoseño que las Universidades nacionales, en cumplimiento de sus objetivos fundacionales, y en función de sus propios recursos y potencial humanos, están en óptimas condiciones para desarrollar estudios e investigaciones aplicadas, como se ha logrado en este proyecto, como así también tienen suficiente capacidad como para luego transferir sus resultados a los gobiernos, asociaciones intermedias y otros actores sociales de las ciudades intermedias de la región con el objeto de generar iniciativas de gestión.
En tal sentido, agregó que en base a sus potencialidades de carácter territorial o urbano, las casas de altos estudios nacionales aportan oportunidades de desarrollo a los estados locales.
Dijo que el principal beneficio para las Universidades se da en su inserción en el NEA, como medio o instrumento para posibilitar soluciones a mediano y a largo plazo a los problemas estructurales de la región, respondiendo a situaciones intrínsecas de la misma con soluciones tecnológicas, económicas y sociales de acuerdo a la realidad actual, previendo tanto situaciones futuras, como consecuencias positivas y negativas, pero posibles de ser modificadas y/o encausadas para beneficio de los usuarios finales del proyecto: los habitantes de la región NEA y sus Gobiernos locales.
Acciones en la provincia
Más adelante, Gorleri se refirió al trabajo de “relevamiento, análisis, diagnóstico de la situación actual en las ciudades de Formosa y Laguna Blanca”, precisando que en esta fase se obtuvo un panorama completo de la situación actual, de las ciudades de Formosa y Laguna Blanca.
Para ello se desarrollaron los siguientes ítems: encuesta sobre ciudades intermedias (Programa UIA-CIMES), situación y tendencias legislativas.
Explicó el investigador que la metodología aplicada fue: relevamiento de información existente en entes oficiales y/o privados, como así también relevamiento de campo (in situ) en casos particulares, y procesamiento de la misma: análisis estadístico y cuantitativo y elaboración de informes parciales y final general de situación. La encuesta se realizó siguiendo los lineamientos y la metodología del Programa de Ciudades Intermedias (CIMES) de la Unión Internacional de Arquitectos (UIA).
Asimismo, dijo que para identificar los orígenes, tipos y composición de residuos urbanos (RSU) se aplicaron diversos criterios como: orígenes, tipos y composición de residuos sólidos urbanos (RSU); propiedades físicas, químicas y biológicas de los residuos sólidos urbanos, etcétera.
En el proyecto desarrollado en la provincia participaron el rector de la UNaF, el ingeniero Martín Romano; el intendente capitalino, el ingeniero Fernando de Vido; y los funcionarios comunales Alfredo Cabral, secretario de Servicios Públicos, y Miguel Hermosilla, director de Gestión Ambiental.
En tanto, el equipo técnico estuvo compuesto por: el ingeniero MSc. Gorleri, responsable del proyecto; la profesora Luisa Murdoch y el ingeniero forestal Ricardo Oviedo (UNaF); el arquitecto Eduardo Gaona, el ingeniero Roberto Villalba y la ingeniera Paula Muzzio (Municipalidad de Formosa); el licenciado Ramiro Fernández Patri (Honorable Cámara de Diputados de Formosa) y la arquitecta Susana Fourcans (Reserva de Biosfera Laguna Oca).
En el caso de Laguna Blanca participaron el intendente de esa localidad, el doctor Ricardo Lemos, y el licenciado Alejandro Alarcón, secretario general. Por la Comuna, el licenciado Alejandro Alarcón y Ricardo Gabriel Jara.

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