El pasado 19 de septiembre, cinco jóvenes técnicos, recientemente egresados de la Facultad de Recursos Naturales (FRN) de la Universidad Nacional de Formosa (UNaF) recibieron sus títulos de ingenieros forestales, en el marco de una emotiva ceremonia en la que expresaron reconocimientos y agradecimientos. Son los primeros que egresan de una cohorte conformada por alumnos con el título de técnicos provenientes de la provincia del Chaco.
El flamante ingeniero forestal Sebastián Kees señaló: “Hemos recibido en nuestras manos uno de los sueños y anhelos que tiene todo estudiante de Ingeniería Forestal: el título de ingeniero forestal”.
Explicó que “este grupo era parte de uno más grande de técnicos forestales, que llegó hace ya varios años a la Universidad de Formosa cargado de sueños, expectativas, temores, preguntas y necesidades, con cierta experiencia ya sobre los hombros, pero con muchas ansias de graduarse como ingenieros”.
“El tiempo transcurrió y comenzamos a encontrar aquellas respuestas que fueron dando forma a nuestra profesión –detalló-. En general, quienes tomamos la iniciativa de continuar con una formación de grado nos caracterizamos por la inquietud, creatividad y constancia; también sabemos que se puede aportar mucho al sector forestal, pero se necesitaba subir un escalón más en nuestra formación”.
Demandas sociales
Seguidamente Kees afirmó: “El desafío no era pequeño, ya que muchos de nosotros tenemos familia, responsabilidades laborales y obligaciones sociales que de cierta forma también ayudaron a templar nuestro carácter profesional”.
“Así llegamos a la UNaF, desde distintos puntos de la provincia del Chaco, buscando fundamentos y herramientas que permitan dar respuesta las demandas de la sociedad, las que son cada día más y a las que debemos, necesariamente, responder”, reconoció.
Tras el acto de recepción de títulos, Kees manifestó: “Hemos dejado de ser alumnos y nos convertimos en ingenieros. Ello significa que adquirimos voz en los ámbitos académicos, voz autorizada y digna de ser escuchada. Hemos conformado nuestra identidad profesional”.
“En este camino hemos superado muchos obstáculos, que se generaron a partir de diversas situaciones, ya sea de índole laboral, familiar o académico; hemos atravesado barreras ideológicas y numerosos tribunales examinadores, muchas veces de la misma materia, lo cual no ha dejado de enseñarnos que es el reflejo de lo que transcurre día a día, la vida misma”, reflexionó.
UNaF
Resaltó Kees que “la Universidad formoseña ha puesto en nuestras mochilas un cúmulo de conocimientos y ahora tenemos la obligación de transmitirlos, de aplicarlos con responsabilidad, de difundirlos para avanzar en el bienestar de la humanidad”.
Dijo que “llegar a este punto de nuestra formación y mirar hacia atrás nos trae imágenes de todos aquellos que nos acompañaron y a quienes necesariamente debemos agradecer. Por nuestras ausencias prolongadas, gracias a nuestras familias; cada uno desde su lugar aportó para que pudiéramos recibirnos”.
“No hay más que agradecimiento de nuestra parte hacia la UNaF, a sus autoridades, personal administrativo y cuerpo docente, por abrirnos las puertas y brindarse a nosotros; somos conscientes del gran trabajo que hicieron y los no pocos inconvenientes que nos han ayudado a superar”, enfatizó el nuevo ingeniero.
Luego brindó un “reconocimiento especial para los compañeros con los que compartimos horas de trabajo, emociones por los logros, tristezas por quienes fueron quedando por el camino. A los profesores, que además del conocimiento compartido, han entregado mucho más de lo que se les puede pedir: su humanidad, porque dándola han dejado profundas huellas, no solo en nuestra formación, sino también en lo personal, donde la humildad, el esfuerzo y la paciencia que nos dedicaron han sembrado admiración, afecto y vínculos de amistad, lo que en definitiva supera cualquier dimensión de valor”.
“Si bien hemos concluido una parte del camino, no olvidamos a aquellos compañeros que todavía siguen caminando por esta senda. A ellos les decimos que no bajen los brazos ni debajo del agua porque la constancia, el esfuerzo y la perseverancia tarde o temprano darán sus frutos. Mantengan una perspectiva temporal, es decir, sólo es cuestión de tiempo, nada más”, exhortó.

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