Al asumir su segundo mandato como rector de la Universidad Nacional de Formosa (UNaF), el Prof. Esp. Augusto Parmetler, revalidó “su compromiso con la educación pública, provocando el incremento de las oportunidades y el crecimiento de la estabilidad de nuestros estudiantes”, a la vez que aseguró que potenciará “todas y cada una de las posibilidades para que miles de formoseños tengan mejores oportunidades aún”.

En el inicio de su discurso, expresó: “Es un inmenso orgullo continuar representando a la Universidad Nacional de Formosa”, destacando que “la educación desde hace un tiempo a esta parte es concebida, pese a quien le pese, como un factor de inclusión y movilidad social en una sociedad que demanda cada vez mayores conocimientos”, haciendo referencia a lo trazado por el gobernador Gildo Insfrán en el Modelo Formoseño, en el sentido de que «la educación es el nuevo rostro de la justicia social».

Y remarcó que “cuando se invierte en educación superior se invierte en el conjunto de la sociedad, principalmente en quienes se benefician con el trabajo profesional y los avances que producen nuestros egresados para el bien común y contribuyendo así al mejoramiento de las condiciones de vida de nuestro pueblo”.

Por ello, “uno de los objetivos de la UNaF es crear condiciones para la igualdad de posibilidades de permanencia y de acceso a aprendizajes de calidad para todas y todos, cuestión que hemos desarrollado en estos últimos años. Se aprende de equidad si se recibe o se forma parte de un sistema equitativo. Se aprende aquello que se recibe”.

Al aludir al COVID-19, resaltó que “la crisis institucional fundamentalmente la generada por dos años consecutivos de pandemia no fueron suficientes para detener la marcha de nuestra Universidad. Así, se siguieron desarrollando actividades que fortalecieron sus tres ejes fundamentales y de su plan estratégico: el fortalecimiento institucional por una parte, la vinculación universidad comunidad por otra, y la pertinente contribución con el desarrollo local y regional”.

En ese sentido, durante la contingencia sanitaria, “las políticas de inclusión se orientaron a proveer las condiciones materiales fundamentales para el ejercicio efectivo de los derechos de acceso y permanencia de nuestros alumnos y alumnas, mencionando aquí la dotación de recursos (tablets, pendrives, becas y materiales didácticos), así como la construcción y renovación de espacios físicos (El Paseo de las Artes, el pavimento interno, el Centro de Promoción de la Salud, el Comedor, el Salón de Conferencias Rectores de la UNaF, la finalización del Módulo V y la ampliación de la radio), los cuales “fueron concebidos como una condición necesaria para dar lugar a una propuesta educativa amplia e inclusiva”.

Agradeció además “la enorme ayuda que nos brindó el gobernador Insfrán con la construcción de laboratorios, salones en el Módulo III, como el financiamiento de algunas carreras”, como también al intendente de Formosa Ing. Jorge Jofré “por su permanente colaboración con la iluminación, limpieza y mejoramiento del entorno físico de la UNaF”.

“Así de manera solidaria se construye una comunidad responsable y su consecuente paz social”, subrayó.

Crecimiento institucional

En otro tramo de su alocución, el rector Parmetler afirmó que “la peculiar forma de ser de nuestra comunidad universitaria hace que esta haya tenido, desde su inicio, un crecimiento institucional en cuanto al profesionalismo docente e investigativo, como el mejoramiento de nuestra relación con nuestros estudiantes y egresados”.

“Pero –agregó- las perspectivas de nuestra UNaF son aún más ambiciosas para los próximos años: con la proyección de contar con un edificio nuevo en el campus, (el Módulo VI), la puesta en marcha del Comedor, nuevos laboratorios, carreras a distancia y de complementación curricular, conjuntamente con todos los programas y proyectos en funcionamiento, nos pone en el desafío de potenciar los lazos institucionales entre los claustros y desarrollar un cambio cualitativo de la dimensión institucional tanto en su organización, en su desarrollo académico como en su vínculo con la comunidad”.

Y avanzó ponderando que “hoy existen innumerables producciones académicas y científicas de nuestros docentes y también de alumnos, la gran mayoría de ellos en estrecha relación con nuestra comunidad. En convencimiento este que, contexto, en expresamos momentos de crisis el e incertidumbre, es fundamental reafirmar el liderazgo social de la Universidad. Este lugar de referencia en el espacio público se ejerce, también, en la capacidad de dar certezas a sus comunidades y minimizar el impacto negativo que alguna crisis pueda producir”.

Para finalizar, sostuvo con contundencia: “Me siento orgulloso de conducir una Universidad en la que nuestros alumnos o egresados muestran su profesionalidad en sus producciones académicas y participación institucional”.

“Soy un hijo de esta Universidad que solo busca devolver todas y cada una de las posibilidades que la UNaF me brindó, pero potenciándola, para que miles de formoseños tengan mejores posibilidades aún”, resaltó y concluyó su juramento “sosteniendo mi compromiso con la educación pública, provocando el incremento de las oportunidades, y fundamentalmente, el crecimiento de la estabilidad de nuestros estudiantes”.